EL TELESCOPIO
En primer lugar, el telescopio según RAE es un "Instrumento que permite ver agrandada una imagen de un objeto lejano. El objetivo puede ser o un sistema de refracción, en cuyo caso este recibe el nombre de anteojo, o un espejo cóncavo". La utilización de la óptica se remonta al siglo XIII, pero los primeros telescopios son del siglo XVII inventados por ópticos holandeses.
El primer científico que usó el telescopio fue Galileo Galilei (1564-1642), inventor, entre otras cosas, de un modelo de telescopio que todavía hoy lleva su nombre. El uso de ese instrumento le permitió a Galileo ver cuatro satélites de Júpiter (los cuatro mayores satélites, que hoy se denominan galileanos)
Los telescopios son instrumentos que permiten ampliar las imágenes de objetos distantes, como las estrellas. Actualmente existen diferentes tipos de telescopio (refractor, reflector, de espejos múltiples, gigantes, radiotelescopios), que son muy especializados y funcionan de diferentes maneras.
TIPOS:
Este tipo de telescopio tiene un tubo largo, relativamente delgado con el lente principal (objetivo) en el frente, el cual recolecta y enfoca la luz.
El tipo de telescopio astronómico más sencillo tiene dos lentes. Ambas son convexas; es decir, más gruesas en el centro que en los extremos. La lente más cercana al objeto se llama objetivo. La luz de una fuente distante pasa por esta lente y llega a un foco como una imagen "‘real" e invertida dentro del tubo del telescopio. La lente del ocular aumenta la imagen formada por el objetivo.
En un telescopio astronómico, la imagen "‘virtual" formada por el ocular queda invertida.
REFLECTOR:
Utiliza un espejo cóncavo grande y pesado, en vez de lentes, para recolectar y enfocar la luz. Se mira a través del ocular situado a un lado del tubo, cerca del extremo superior.
La luz de objetos lejanos como las estrellas entran en el tubo del telescopio en rayos paralelos, que se reflejan en el espejo cóncavo hacia un espejo plano diagonal. El espejo diagonal refleja la luz a través de una abertura en un lado del tubo del telescopio a una lente del ocular.
Los telescopios reflectores pueden ser mayores que los refractores porque el espejo curvo se puede apoyar en toda su superficie, mientras que una lente grande sólo se puede apoyar en sus extremos.
Los espejos más grandes tienen ventajas porque pueden recoger más luz. Entre los telescopios reflectores modernos se encuentra el reflector de 508 cm del Observatorio Monte Palomar en California (EEUU) y el de 400 cm del Observatorio Interamericano de Cerro Tololo cerca de La Serena, Chile.
CATADIÓPTRICO:
También se les llama telescopios complejos.
Utilizan lentes y espejos. El objetivo es un espejo cóncavo pero en la abertura hay una lente correctora que sostiene además un espejo secundario.
El tubo es ancho y corto, el ocular va situado en el extremo posterior a la lente.
Los catadióptricos generalmente son instrumentos potentes y de alta calidad que gracias a un diseño más complejo gozan de un tamaño compacto y por tanto más fácil de transportar y manejar.
RADIOTELESCOPIOS:
Es un conjunto de aparatos utilizados para el estudio del universo por medio de la captación de radiaciones electromagnéticas provenientes de cuerpos celestes como el Sol, las estrellas, y otros fenómenos estelares.
Los radiotelescopios poseen una antena parabólica en forma de plato que capta las señales de radio procedentes del espacio cósmico. Estas señales son conducidas a un receptor para ser descifradas y por medio de computadoras obtener la imagen de los cuerpos y fenómenos cósmicos.
TELESCOPIO ESPACIAL HUBBER:
En 1990 partió hacia el espacio un telescopio distinto a los que se habían puesto en órbita hasta entonces. Hubble es el primer telescopio espacial que observa la luz visible. Gracias a ello, se ha podido ver todo lo que se había observado desde la tierra pero con muchísima más calidad.
Cinco descubrimientos importantes tras el lanzamiento de este telescopio:
1. El espacio profundo:
Se bautizó como el Campo Profundo de Hubble (Hubble Deep Field o HDF). Y su estudio ha proporcionado datos inéditos y de gran importancia para el estudio del Universo.
Los objetos más cercanos que se aprecian en el HDF son un puñado de estrellas de la Vía Láctea, nuestra galaxia. Ellas no son precisamente los cuerpos que interesaban a los astrónomos. Ellos querían ver lo que había detrás de ellas, lo más profundo de ese minúsculo parche. Hasta entonces no se había podido mirar tan lejos. Y Hubble podía hacerlo. Gracias a ello se pudo saber cómo evolucionan las galaxias lejanas.
"Su estructura es grumosa e irregular, no está definida como sucede en las más cercanas, que tienen forma de espiral o elíptica", explica Gil de Paz. "Una de las teorías que explicarían este fenómeno sugiere que las galaxias lejanas están aún formándose, sus componentes (el gas y las estrellas) están tomando posiciones, por eso no tienen una forma concreta como las galaxias cercanas, que son más `viejas"".
En 2009, el Hubble regaló al mundo nuevas imágenes de galaxias jamás vistas. Las más jóvenes registradas. Se formaron tan solo 600 millones de años tras el Big Bang. Las captó gracias a una cámara instalada en la última misión de servicio.
2. La edad del universo
En los años veinte del siglo XX, el astrónomo Edwin Hubble descubrió que el Universo se expande. El científico acuñó un término, la constante de Hubble. "Es el parámetro más importante de la cosmología. Describe la velocidad de expansión del Universo y su edad", explica Gil de Paz.
En 1999 el telescopio Hubble midió con una precisión sin precedentes la constante. Antes del Hubble, un gran número de científicos estimaba que la constante era de 50 kilómetros por segundo por megapársec (un millón de pársecs equivalente a unos 3,26 millones de años luz).
El Hubble afinó ese número y desveló que la constante es de 72 y, por lo tanto, la edad del Universo es de 13.500 millones de años. Más adelante, en 2001 la NASA lanzó el satélite WMAP, diseñado específicamente para calcular con mayor precisión y menor error la constante de Hubble. Los resultados coincidieron con los de que había proporcionado el telescopio. "Significó la confirmación del éxito del telescopio Hubble y del equipo que había calculado la nueva constante", apunta el experto.
3. Los agujeros negros supermasivos:
En 1994 el telescopio Hubble proporcionó evidencias reales de que los agujeros negros supermasivos existen. Hasta entonces estos fenómenos bizarros eran el resultado de los cálculos realizados por Albert Einstein en 1915.
El Hubble detectó 'algo' supermasivo en el centro de la galaxia elíptica gigante M87. Los científicos midieron la velocidad del material que lo rodeaba y realizaron loa cálculos pertinentes y concluyeron que era una masa 3.000 veces la de nuestro Sol concentrada en un espacio más pequeño que nuestro sistema planetario.Los agujeros negros son destructores y a la vez creadores. Engullen materia, todo aquello que encuentran cerca, desde gas a estrellas y, a la vez, escupen chorros de partículas de energía superalta y radiación. Estos chorros llegan muy lejos y son el germen de nuevas estrellas. Del apetito voraz de los agujeros negros no escapa ni la luz, así que para localizar uno, los astrónomos buscan una masa enorme concentrada en un espacio muy pequeño.
Habían detectado, por primera vez en la historia, un agujero negro. Tras este primer descubrimiento el telescopio ha encontrado muchos más.
4. Discos protoplanetarios en Orion:
La altísima resolución del telescopio Hubble ha permitido obtener imágenes que antes eran impensables. Han sido muchas, pero una de las más relevantes es la colección de 30 discos protoplanetarios en la nebulosa de Orión.
Son `embriones" de sistemas planetarios. Cuando una estrella nace en la nebulosa, se arremolinan a su alrededor polvo y rocas. Poco a poco irán cobrando forma de sistema planetario. Con el muestrario de discos protoplanetarios recogidos por Hubble los científicos han podido caracterizarlos. Han averiguado que son de lo más variado y han permitido conocer muchos detalles sobre la formación de los sistemas planetarios.
5. La primera "foto" de un planeta extrasolar
En 2005, el Hubble obtuvo la primera imagen de un planeta orbitando una estrella diferente al Sol. Era la estrella Fomalhaut, una estrella `bebé" en comparación con el astro Rey.
El telescopio tomó imágenes en 2002 y 2006 de esta estrella. Luego, los científicos "quitaron la luz que desprendía y apareció una mancha, un puntito. Era un planeta", explica con sencillez Gil de Paz.
En 2009, repasando unas imágenes archivadas captadas por el telescopio en 1998, se detectó otro exoplaneta, joven y muy caliente.
6000 estudios científicos
A día de hoy se han descubierto muchos exoplanetas mediante cálculos y observaciones, pero no de la forma tan original con la que lo hizo Hubble.
Son muchos más los descubrimientos que Hubble ha proporcionado a lo largo de sus dos décadas de vida. Hasta 6.000 estudios científicos se han publicado gracias a él. Uno de los más recientes es el primer mapa de distribución en tres dimensiones de la materia oscura en el espacio hecho en colaboración con otros telescopios terrestres.
Más éxitos según este portal seguirán en los próximos años. No habrá nuevas misiones de servicio para este glorioso telescopio que preveén que permanezca en plena forma unos cinco años más.Ahora a este telescopio le sustituye el telescopio James Webb que fue lanzado en el 2014.
Fuentes:
Real academia Española(s.f.). Recuperado de:http://lema.rae.es/drae/srv/search?id=dZa5t7cuFDXX2DhiaX8K.Tipos de telescopios(s.f.). Recuperado de:http://www.profesorenlinea.cl/mediosocial/TelescopioTipos.htm
Vlenzuela, A.(2010). Cinco grandes descubrimientos del veterano Hubble. Recuperado de http://www.rtve.es/noticias/20100423/cinco-grandes-descubrimientos-del-veterano-hubble/328745.shtml